Existo por tu mirada

Odio la forma en la que te mueves a mi alrededor
Y en la que juegas a tirar y soltar de la cuerda
A la que sin querer me he dejado enredar.

Odio el hecho de desaparecer si no estás presente
Y de sentir que solo existo si me miras, sólo a mí
Para volver a sentirme transparente al día siguiente.

Maldigo las veces que he dejado que me derritas
O en las que me he perdido en tus ojos azules,
Pausada como quien mira una ilustración poco usual,
Parada como idiota mientras los segundos se desvanecen.

No debo dejar que maldigas mi suerte
Y mi tiempo se convierta en cenizas cada día posterior,
Viviendo en el recuerdo de instantes de ilusión,
O momentos frustrados en los que elegiste no actuar.

Puedo morir esperando una chispa más que me indique
El camino hacia tus caricias embriagadas de licor dulce.
Mas aquí sigo entre remordimientos jugando a que me juegues
O que creas que el juego no es contigo
Para de nuevo volver a ti con miradas de picardía
E indicarte que tal vez podría querer dejarme enredar de nuevo.

Pero de ilusiones vacías nos vamos llenando el saco de depresiones
Y tan sólo las palabras y los parajes dejan mi mente descargarse
De sueños que no tienen salida y obstaculizan las prioridades
De memorias muertas que atemporizan los días y los vuelven vacíos.

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